IMPORTANCIA DEL CONTROL GINECOLOGICO REGULAR

Si bien las visitas anuales al ginecólogo pueden evitar problemas de salud o detectar de forma precoz enfermedades, son pocas las mujeres que siguen este consejo, consultando cuando detectan algún padecimiento, pero no de forma preventiva. El control ginecológico regular permite detectar tempranamente enfermedades, que diagnosticadas con anticipación pueden ser vencidas.

Entre los estudios de rigor se encuentran:

• Papanicolau (PAP) y colposcopía (en mujeres que han iniciado su actividad sexual). Se utiliza para diagnosticar cáncer cervicouterino y lesiones precursoras relacionadas con el virus del HPV(Virus Papiloma Humano)

• Examen mamario: debe ser realizado todos los años por un ginecólogo y todos los meses mediante autoexamen. La consulta ginecológica debe incluir el entrenamiento de las pacientes. Las imágenes mamarias son capaces de detectar patología antes de que las lesiones sean palpables. Se recomienda realizar una mamografía y ecografía mamaria entre los 35 y los 40 años, y luego de esa edad incluirlas rutinariamente en los controles. Aquellas mujeres que tienen antecedentes familiares de cáncer de mama en edades jóvenes se les aconseja iniciar sus estudios con anterioridad.

• Ecografía transvaginal. Se solicita cuando hay algún síntoma, o ante la eventualidad de tener que llevar un control más estricto sobre alguna lesión ovárica y/o uterina. Podría ser considerado dentro de la rutina de pacientes menopáusicas, en donde se debe hacer un control más estricto en busca del cáncer de ovario.

Además del control anual, existen algunas situaciones ante los cuales la consulta ginecológica no debería ser postergada, que varían según la edad de la paciente: son ejemplos la adolescente de 16 años que no inició sus ciclos menstruales o las niñas que los inician antes de los 9 años, las menstruaciones que se producen antes de los 21 dias, las que duran más de 8 días, las muy dolorosas, las irregularidades menstruales persistentes, el flujo maloliente acompañado o no de picazón así como las pérdidas hemáticas después de la menopausia.
Otro aspecto para consultar es notar alguna asimetría o protuberancia en la mama, o sentir que hay una retracción de la piel, un área más colorada, o percibir que una mama es más grande que la otra.

El control ginecológico anual es un acto médico que en líneas generales incluye los ítems descriptos. Sin embargo no todas las mujeres presentan las mismas dolencias ni requerimientos por lo que ¨los análisis de rutina¨ no son los mismos para todas las pacientes.

Dra María Elisa Bértola | Servicio de Ginecología de Clínica Modelo de Morón