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El objetivo esencial de esta fecha es dar a conocer al trastorno de la deglución (dificultad para tragar alimentos sólidos, líquidos o incluso la propia saliva). Para quienes la padecen tiene graves consecuencias en la capacidad para nutrirse e hidratarse, el estado general de salud y la calidad de vida. Se asocia a una serie de síntomas como dolor al tragar, problemas respiratorios y desnutrición.
La disfagia puede tener diversas causas, una de ellas, la llamada acalasia, provoca que el esfínter no logre relajarse impidiendo el paso de los alimentos del esófago hacia el estómago. También la presencia de algún tumor en esta región puede provocarla.
En todos los casos es fundamental el asesoramiento de un especialista en nutrición para adecuar la dieta y que siga existiendo un correcto balance entre las cantidades de hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales, evitando la desnutrición. Se pueden incluir suplementos nutricionales y otros tratamientos alternativos que solo un experto en esta materia podría indicar.
En el caso de pacientes con padecimientos más crónicos y donde exista la presencia de otras patologías, un diagnóstico temprano será fundamental para la pronta recuperación y mejorar la calidad de vida.
Las personas que padecen de esta condición se ven enfrentadas a situaciones un tanto incómodas que en cierta forma altera su vida personal y el vínculo social. Sin embargo, aún con cambios en los hábitos alimenticios, se puede aprender a sobrellevar de una forma casi normal donde resulta importante la comprensión y ayuda de familiares, amigos y de los distintos entornos sociales con los que la persona se relacione.La receta saludable:
Flan de banana (de consistencia blanda y concentrado en calorías)
Ingredientes: (5 porciones) 4 huevos, 1 clara de huevo, 1 cdita de esencia de vainilla, 400 g de leche consensada, 1 pizca de sal, 1 taza de puré bananas (bien maduras). Para el caramelo: 150 g de azúcar, 6 cdas de agua fría y 1 cdita de jugo de limón.
Preparación:
Mezclar los huevos con la clara, la leche condensada, la esencia, la sal y el puré de bananas.
Colocar en moldes acaramelados y cocinar a baño de María en horno precalentado a temperatura media a baja (170 °C) durante 40 minutos aproximadamente.
Retirar, dejar enfriar y desmoldar.
Para el caramelo: colocar en una olla baja (o una sartén antiadherente) y cocinar a fuego lento sin remover hasta que tome consistencia (pasará de un espeso “jarabe” a ir adquiriendo una tonalidad más oscura). El punto ideal de caramelo es cuando el color es claro (similar a la miel), si se pone muy oscuro puede tomar un sabor amargo.
En el momento en que adquiera la consistencia y el color deseado, mover la olla o sartén suavemente (sin utilizar espátula) para unificar.
Una vez listo, retirarlo y utilizar inmediatamente (para acaramelar los moldes).
Lic. Sonia Eli Ramirez | Nutrición - Chef
Sanatorio Clínica Modelo de Morón.