Es el nombre que recibe un grupo de trastornos oculares, en los que se lesiona el nervio óptico. El nervio óptico transmite la información visual del ojo al cerebro.
Es la segunda causa de ceguera en todo el mundo.
Existen distintos tipos de glaucoma: de ángulo abierto, de ángulo cerrado, secundario a otras enfermedades y congénito.
Es importante saber qué tipo de glaucoma padece el paciente. Si sufre glaucoma de ángulo cerrado, hay ciertos medicamentos generales que pueden estar contraindicados; por lo tanto debe consultar con su médico oftalmólogo.
En la mayoría de los tipos de glaucoma, el sistema de drenaje del ojo se tapa y el fluido intraocular no puede drenar. Al acumularse, causa un aumento de presión en el interior del ojo dañando el nervio óptico con la pérdida consiguiente del campo visual. Además intervienen otros factores ya que personas con presión ocular “normal” también pueden sufrir de glaucoma.
El daño se inicia en las partes periféricas del campo visual y, si no se trata, progresa hasta producir una visión en túnel, en última instancia, ceguera.
¿Cuáles son los síntomas? En general no hay síntomas molestos o dolorosos en su comienzo; no se dan cuenta de la afección hasta que presentan un daño importante del campo visual.
En cambio en el glaucoma agudo: el paciente se presenta a la consulta con visión borrosa, dolor del globo ocular, dolor de cabeza, nauseas y vómitos, aparición de halos de colores alrededor de las luces brillantes y pérdida repentina de la visión.
¿A quién afecta? El glaucoma puede afectar a personas de todas las edades, desde bebes hasta adultos mayores.
Las personas con mayor riesgo son las personas mayores de 55 años, los parientes de personas que padecen glaucoma, los diabéticos, pacientes con miopía, las personas medicadas con corticoide en forma prolongada.
¿Cómo se diagnostica? Se evalúan ciertos parámetros: Oftalmoscopía (Características del nervio óptico), Tonometría (Presión Intraocular). Ante la primer sospecha se solicitarán estudios secundarios, Papilografía (se observa una imagen del nervio óptico útil para su seguimiento y evaluación), Paquimetría (se evalúa el espesor corneal) y campo visual computarizado.
¿Cómo se controla? Los pacientes sin riesgos deben realizar un control en forma anual y aquellos que posean antecedentes familiares o alteraciones de los parámetros estudiados cada 3 o 6 meses.
¿Hay cura? No existe cura para el glaucoma hasta la actualidad. No obstante la detección temprana, un correcto tratamiento y una cuidadosa vigilancia, se puede controlar en general el glaucoma (conservando en la mayoría de los casos una visión útil durante toda la vida).
Tratamiento
El principal fin del tratamiento es controlar la progresión del glaucoma previniendo la pérdida del campo visual y la visión. Este consiste en medicamentos en modo de colirios, láser y/o microcirugías obedeciendo las condiciones de cada paciente.
EL GLAUCOMA ES PELIGROSO PORQUE NORMALMENTE NO HAY SÍNTOMAS HASTA QUE OCURRE UN DAÑO SEVERO. LA BUENA NOTICIA ES QUE CON EXÁMENES OFTALMOLÓGICOS PERIÓDICOS, LA DETECCIÓN TEMPRANA Y EL TRATAMIENTO PUEDE PRESERVARSE LA VISIÓN.NO DUDE EN ACERCARSE A SU OFTALMÓLOGO.
Servicio de Oftalmología
Sanatorio Clínica Modelo de Morón
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