PREVENCION DE LOS ACCIDENTES POR PIROTECNIA

Cada año, en Argentina se celebran Navidad y Año Nuevo mediante la detonación masiva de artículos pirotécnicos, generalmente utilizados en forma doméstica por personas inexpertas en manejo de explosivos, y esto genera cientos de lesiones prevenibles tanto a los que manipulan la pirotecnia como a los observadores de las mismas. Además de generar sufrimiento a muchas familias, pérdidas de vidas y daños a la salud, la pirotecnia suele causar importantes daños materiales y al medio ambiente por los incendios que provoca.

En Argentina al menos más de 1000 personas anualmente deben ser asistidas en instituciones de salud por lesiones por pirotecnia. El 50% son niños y de estos el 75% son varones. Entre el 25 % a 50% de los lesionados son solo espectadores u observadores, que no manejan ni encienden artefactos pirotécnicos.

En su mayoría (40%) las lesiones se producen en la cabeza, afectando a los ojos en un 15 a 30%. Luego se producen lesiones en los miembros superiores, 20 a 40% de éstas afectan las manos y los dedos. El resto de lesiones se producen en los miembros inferiores, por ejemplo en los pies por pisar artefactos; tronco y genitales por tener artefactos pirotécnicos en los bolsillos.

¿Cómo se pueden prevenir este tipo de lesiones?

• Los niños se pueden lesionar con pirotecnia a pesar de estar supervisados por adultos responsables y que no solo se lesionan por usarla sino también por estar observando.

• No existe pirotecnia segura ni de bajo riesgo, todas pueden producir lesiones. Hasta las “estrellitas” pueden quemar la ropa o lesionar los ojos; otro ejemplo la punta de una bengala llega a una temperatura de 537 ºC, suficiente para causar quemaduras de tercer grado.

• No utilizar pirotecnia clandestina, a pesar que no son las únicas que pueden producir lesiones.

Los pediatras recomendamos a los padres disfrutar de los fuegos artificiales de la única forma segura, las exhibiciones públicas que cumplan con la normas de seguridad y autorización correspondiente, en lugar de fuegos artificiales para uso doméstico.

¿Cuáles son las conductas riesgosas con el uso de pirotecnia?

La primera conducta riesgosa es utilizar pirotecnia y permitir su uso a los niños.

• Reencender o tocar artefactos artificiales que fallaron o no encienden.

• Transportar los artefactos en los bolsillos.

• Arrojar pirotecnia a otras personas o cosas.

• Utilizar pirotecnia en el interior de las casas.

• Usar pirotecnia clandestina, defectuosa, dañada o adquirida en la vía pública, por correo o Internet.

• Hacer estallar pirotecnia en recipientes metálicos o de vidrio.

• El consumo de alcohol aumenta el riesgo de accidentes.

• Entregar o arrojar bengalas o estrellitas encendidas a otra persona o encender más de una a la vez. Se debe respetar la distancia recomendada de 1,8 metros al encender bengalas o estrellitas.

¿Cuáles son las conductas recomendadas?

• Utilizar pirotecnia en lugares despejados, al aire libre, alejados de otros edificios.

• Alejar a los niños a una distancia segura.

• Los fuegos de artificio proyectables (cañitas, cohetes, etc.) no deben ser dirigidos o apuntados hacia otra persona, viviendas, elementos combustibles y/o árboles frondosos.

• Encender los fuegos artificiales uno por uno, y retirarse a una distancia prudencial rápidamente.

• No exponer la cara y ojos.

• No entrar a locales en donde haya una excesiva acumulación de pirotecnia.

• No exponer los elementos de pirotecnia a fuentes de calor.

Datos sobre los artefactos de pirotecnia

• Utilizar aquellos productos que están controlados y autorizados por la Dirección General de Fabricaciones Militares (DGFM)

• Ver que en el envase figure el código de “nivel de riesgo”: ‘A’ es la pirotecnia de bajo riesgo (estrellitas y serpentinas), ‘B’ es la de riesgo limitado (volcanes, candelas y petardos), y ‘C’ es la de riesgo elevado y venta controlada (bombas de estruendo o de luces).

• Por seguridad la carga de pólvora no debe exceder más de 50 mg. Ningún producto debe tener más de 130 mg de pólvora.

• No comprar ni usar aquellos productos que poseen riesgo de explosión en masa (por ejemplo los rompeportones).

• No comprar artificios pirotécnicos clasificados como de Venta Controlada.

Para finalizar las fiestas con la misma alegría que comienzan y no en una guardia de un hospital: NO UTILICE PIROTECNIA, no transformemos esta alegría en tristeza por no ser precavidos

Dr Federico Filardi | Coordinador del Servicio de Pediatría de Clínica Modelo de Morón